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Rugosidad, textura y acabado superficial en piezas complejas (ISO 1302, ISO 21920, ISO 25178)
En Zeppelin Metrology sabemos de la creciente importancia de las medidas de rugosidad y como las desviaciones de acabado superficial influyen, tanto en aspectos estéticos como funcionales.
El desgaste de las piezas, la eficiencia de la lubricación, la estanqueidad, el comportamiento a fatiga, la generación de ruidos, la respuesta mecánica y la duración de los componentes están directamente relacionados con el acabado superficial.
Si ya realiza medidas de rugosidad, tanto para uso propio como para clientes o proveedores, habrá notado gran diversidad de anotaciones en los distintos planos de fabricación.
Muchas veces se siguen usando anotaciones ISO obsoletas que generan confusión y que no deberían usarse en los planos de fabricación modernos (todas las 1302 anteriores al año 2002).
En los planos de fabricación modernos, la textura superficial se representa con el símbolo de raíz cuadrada acompañada de un rectángulo y se especifica con la norma ISO 25178.
Los perfiles de rugosidad, y en especial los parámetros Ra y Rz, nos resultan muy familiares y aparentemente son fáciles de medir y manejar.
Sin embargo, esto es una falsa sensación que nos puede llevar a evaluar incorrectamente una superficie.
Debemos ser muy cuidadosos con cómo realizamos y evaluamos estas medidas.
Evolución en terminología y tecnologías de medición: del 2D al 3D
En 1930 las medidas de rugosidad comenzaron a realizarse con sistemas 2D que medían perfiles en una línea, usando el contacto de un estilete sobre la superficie a medir. Desde entonces, los parámetros R y W han sido cada vez más populares y sus normas ISO ampliamente utilizadas.
Con los avances tecnológicos producidos a finales del siglo XX, se empieza a medir la rugosidad con medidas 3D de áreas completas. Y con ello también evoluciona la terminología empleada en los parámetros de rugosidad. Ahora hablamos de:
Hoy en día, los requerimientos de fabricación de los acabados superficiales de las piezas son cada vez más estrictos, y las nuevas tecnologías para medición de la textura superficial también tiene mayores capacidades.
Ambos factores (estrictos requerimientos de fabricación y nuevas tecnologías) están desplazando las medidas de rugosidad 2D hacia la medición de texturas 3D, que utilizan nuevos standard ISO y permiten evaluar las superficies con mayor precisión.
Un buen ejemplo es la medición de una pieza muy pequeña, donde es muy complicado posicionar el palpador y el tamaño de la pieza nos impide hacer los largos barridos requeridos por los perfilómetros de contacto.
Otro buen ejemplo se da al tomar medidas en el filete de una fresa.
Zeppelin Metrology puede ayudarle
Si tiene que realizar medidas difíciles o complejas de textura superficial, en Zeppelin Metrology podemos ayudarle. Además, nuestros equipos también realizan medidas metrológicas 3D de dimensión, forma y posición.
Especialmente indicados para piezas con tolerancias muy estrictas que requieran medidas con gran precisión.
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